Más de 1400 personas disfrutaron, la pasada noche de sábado, del ya conocido como sopar de la punxà. Una semana de preparativos y más de ocho horas de montaje, fueron necesarios para llevar a cabo esta multitudinaria cena a la fresca en la Ciudad del Artista Fallero.
El lugar elegido es una de las claves, ya que los artistas trabajan en sus talleres para finalizar las carrozas que se lucirán en la Alameda en la Batalla de flores. Representantes de todas las fallas de la ciudad de Valencia e incluso algún que otro turista, disfrutaron de esta calurosa velada en la que se podían visitar los talleres, observar cómo se pincha la flor o incluso hacer las primeras quinielas sobre la ganadora.
Además, los talleres abren también sus puertas a amigos y familiares que comparten el arte de trabajar la flor. Estos son algunos de los motivos que han convertido el sopar de la punxà en todo un referente dentro de los actos de la Feria de Julio.
Por primera vez este año, la mesa presidencial ha estado compuesta por una amplia representación de los grupos municipales, al que cabe sumar toda la directiva 2015 que fue invitada al acto por su trabajo realizado durante el ejercicio anterior. Tampoco faltó representación por parte del Gremio de Artistas Falleros, con el maestro mayor al frente José Ramón Espuig.
El concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, afirmó que también se había visitado otros talleres, fuera de la Ciudad Fallera, para homenajear el trabajo de los artistas falleros, los verdaderos protagonistas del fin de semana. “ Esta noche es una oportunidad única de que el mundo fallero reconozcamos el trabajo de los artistas y les rindamos homenaje”, afirmó Fuset.
Tampoco quisieron faltar a la cita todas las señoritas y niñas preseleccionadas que aprovecharon para hacerse fotos con las Falleras Mayores de Valencia, entrar en los talleres e incluso bailar sin parar durante toda la noche.
Tras la visita institucional, se llevó a cabo la cena, durante la que cayeron algunas gotas de agua. Pero la fiesta se alargó hasta las tres de la madrugada con la Orquesta Montecarlo.